Descender a la oscuridad
Cuando empieza el descenso, Emma se aferra a la barandilla desgastada, los escalones de madera se balancean bajo su peso. Cada paso incrementa la penumbra, solo interrumpida por los tenues rayos de luz que penetran por las fisuras de las paredes. Las sombras interactúan con sus ojos, provocándole a cuestionarse qué podría existir en los rincones. Cuanto más se adentra, más se le aprieta el pecho, una combinación de temor y esperanza, con recuerdos de antiguas historias relacionadas con la casa resuenando en su mente.

Descender A La Oscuridad
El olor de la bodega
Cuando llega a la base, una corriente de aire frío la acoge, aportando un intenso aroma a humedad y lujuria. Retrospectivas olvidadas de su niñez, cuando se escondía en áticos o sótanos, resurgen, pero este sitio le parece inusual. El terreno se encuentra repleto de libros con mohos y ropa deshecha. El aroma le evoca secretos olvidados hace mucho, sepultados bajo estratos de tiempo y enigmas, y se cuestiona cuántas leyendas preservará este sótano.

El Olor De La Bodega