En busca de consuelo
John se estiró, con la esperanza de ofrecerme algo de consuelo, pero retrocedí, incapaz de soportar su tacto. Cuarenta años de confianza se hicieron añicos en un instante. “No me toques”, dije en voz baja, con la voz quebrada. El hombre que creía conocer había estado guardando un gran secreto, y ahora todo en nuestra vida compartida parecía mentira. Necesitaba espacio para reflexionar.

En busca de consuelo
Caminando entre recuerdos
Mientras caminaba, reflexioné sobre nuestro matrimonio, nuestra vida en común y los cimientos establecidos sobre lo que yo consideraba confianza mutua. Ahora todo parecía mentira. Cada paso me traía recuerdos manchados de desconfianza y traición. ¿Podremos restaurar alguna vez esta confianza rota? El camino que teníamos por delante era incierto, un laberinto de emociones y preguntas sin respuesta. ¿Qué era verdad y qué una fachada hábilmente elaborada?

Caminando entre recuerdos